Charly García, Fito Páez, Graciela Borges, Juana Molina, Cecilia Roth, León Gieco y más de 20.000 artistas firmaron una solicitada en contra del DNU 70/23 y la Ley Ómnibus impulsada por Javier Milei.
Titulada “Carta al Congreso Nacional. La cultura está en peligro”, fue impulsada por el Frente de Soberanía Cultural, está dirigida a diputados y senadores y se manifiesta “en defensa de nuestra identidad”, con un fuerte rechazo a las medidas del nuevo gobierno nacional que afectarían seriamente a las industrias culturales y el arte argentino.
“El Gobierno Nacional pretende, a través de la Ley Ómnibus, derogar leyes vitales para la supervivencia de las industrias culturales, las artes y las ciencias, y el patrimonio cultural de nuestro país”, dice específicamente uno de los fragmentos del texto.
El mismo también está firmado por otras figuras como Leonardo Sbaraglia, Palito Ortega, Luis Felipe “Yuyo” Noé, Tute, Mercedes Morán, Dolores Fonzi, Santiago Mitre, Paula De Luque, Lucía Puenzo, Juan Leyrado, Inés Estévez, Daniel Fanego, Juan Minujín, Julieta Ortega, Darío Grandinetti, Tomás Fonzi, Kevin Johansen, Claudia Piñeiro, Humberto Tortonese, Georgina Barbarrosa, Eleonora Wexler, Emilia Mazer, Albertina Carri, Martín Caparrós, Diego Cremonesi, Jazmín Stuart, Mónica Antonópulos, Alejandra Flechner, Andrea Frigerio, Mirta Busnelli y Soledad Villamil.
Estos nombres, por ejemplo, demuestran el amplio espectro cultural de la solicitada, ya que abarca desde músicxs hasta escritorxs, cineastas, actores y actrices, dibujantes, conductorxs, humoristas y más.
Además, advierten: “La cultura es identidad. La cultura es lo único que no se puede importar. La hacen los pueblos. Queremos seguir teniendo una identidad propia como Nación. De otro modo solo nos quedará el destino triste de no ser. De eso se trata esta lucha. Un país es tan grande o tan pequeño como la medida de su proyecto cultural”.
El Frente de Soberanía Cultural viene realizando actividades semana tras semana y se prepara para formar parte del paro general del 24 de enero impulsado por la Confederación General del Trabajo (CGT).