Vermú Interferencia, la bebida espirituosa que ya es un clásico de La Plata, celebrará su tercer aniversario este 8 de diciembre en el Galpón de las Artes (71 entre 13 y 14). Las entradas se pueden conseguir en este link.
Desde las 18 horas se abrirán las puertas del recinto para que los diferentes proyectos gastronómicos que formarán parte del festejo comiencen a recibir al público.
Para la apertura, Germán García Pérez llevará adelante un set de vinilos, además, habrá una muestra de fotografías sobre el barrio Meridiano V° de la mano de Iñaki Carrera.
Por otro lado, el espacio multimarca “LIVIN” hará una intervención artística y “DEL MONO” tendrá una área de difusión de longboards.
A las 21 horas, el platense S-RICO será el encargado de inaugurar el escenario principal y encender la noche a puro flow. Luego será el turno de MELANIE WILLIAMS & EL CABLOIDE, una de las bandas emergentes de mayor despegue en la escena nacional durante el último tiempo.
Por último, LAIKA PERRA RUSA dará cierre a los festejos, en lo que será una de las primeras presentaciones en la ciudad, luego del lanzamiento de su último disco “Matanza”. Cabe aclarar, que toda la jornada será musicalizada por DJ FACH.
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El patio gastronómico estará compuesto por proyectos locales que han cocinado junto a la bebida platense en diversas oportunidades: Tano’s Pizza, La Bicicletería, TexMex Burritos y Rodolfa Magdalena (comida a base de plantas). El sector de bebidas también prioriza los productos regionales, por eso habrá birras artesanales de Baigón 58, Rauber, Laurus, DC y Winchester. Además, no faltará el gin platense de la destilería Moreira.
Vermú Interferencia nació en La Plata, durante la pandemia, con la idea clara de aportar en la recuperación de los orígenes populares del tradicional aperitivo argentino; para disputarle a las modas pasajeras, a los flashes del centro, a los cócteles preparados muy lindos pero absurdamente caros, según admietieron a través de sus redes sociales.
“El objeivo es compartir con amigxs, familiares, compañerxs. Para hablar de lo jodido que está todo, pero también para evadirse de eso. Para sentarse en el patio, alrededor de un fueguito, y tomarse un vermú mientras el mundo arde”.
Con respecto al nombre del aperitivo, sus creadores, contaron que por un lado viene del vermú como una forma de cortar con la jornada de trabajo y con el mundo de las obligaciones, y por el otro, “somos amantes del post-punk y quisimos hacerle un pequeño homenaje a Joy Division y, en especial, a la famosa tapa de Unknown Pleasures que muestra un espectrograma de un ruido o una distorsión”.
