Jorge Duarte, periodista especializado en temas gremiales, analizó la conformación del nuevo triunvirato de la CGT y las tensiones internas que atraviesa la central obrera en un contexto marcado por debates sobre la reforma laboral y la estrategia sindical frente al Gobierno.
“En la práctica, si bien hubo un acomodamiento, de fondo sigue sin haber un proyecto que unifique al movimiento sindical de la CGT. No hay una cara que ponga en común temas como la reforma laboral, por eso se volvió a un triunvirato.”
El periodista destacó la salida de la UTA del esquema de conducción y su impacto en la capacidad de acción de la central:
“La UTA se fue de la conducción, retiró sus congresales y es difícil pensar que pueda concretar medidas de fuerza. Costó mucho que la UTA se sumara a medidas, salvo casos puntuales. Es una buena noticia para el gobierno nacional.”
También repasó el rol del moyanismo y el frustrado ingreso de una representante mujer a la cúpula:
“Hasta el último día nadie tenía certeza de cómo iba a terminar la conformación. Había chances de que Maia Volcovinsky entrara al triunvirato. Incluso le dieron un guiño con un acto diciendo ‘queremos una mujer en el triunvirato’, pero eso se cayó la misma mañana en Obras.”









