La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, declaró este jueves ante los jueces Petrone, Barroetaveña y Figueroa, en la causa conocida como Dolar Futuro. En su alegato, dejó de manifiesto la intervención del Poder Judicial en las decisiones políticas del país. Finalmente, no pidió su sobreseimiento, sino que sugirió a los magistrados que “hagan lo que tengan que hacer”.
Esta causa “no es sólo lawfare, sino intromisión y manipulación de procesos electorales y política en general” afirmó la ex presidenta, al recordar que la denuncia de los diputados Federico Pinedo (Pro) y Mario Negri (UCR), que dio origen al expediente, se realizó pasados solo 5 días de las elecciones generales de 2015.
“A mí me sentaron acá diciendo que le había causado un perjuicio al Estado por 55 mil millones de pesos. Volvieron a endeudar al país con el FMI con 44 mil millones de dólares para ayudar a la campaña de Macri. Ustedes también son responsables, no miren para otro lado”, acusó CFK al Poder Judicial.
Recordó también, que quienes terminaron beneficiándose con esa política cambiaria, fueron “los amigos de Macri”.
Afirmó además, que “estamos en un momento institucional muy grave”, y pidió a los jueces que no se sigan comportando como una corporación.
Luego fue el turno del gobernador bonaerense Axel Kicillof, entonces ministro de Economía de la Nación. Sostuvo que “la causa dólar futuro es la historia de un disparate jurídico y de una aberración moral” y llamó a los jueces de Casación a “terminar con esta farsa simplemente aplicando la ley, el sentido común y el buen gusto”.