Durante la noche del martes, Alberto Fernández fue trasladado al Sanatorio Otamendi tras padecer un fuerte dolor en la espalda. Allí, “le realizaron los estudios correspondientes evidenciándose hernia de disco lumbar”, explicaron desde Casa Rosada.
Este miércoles, el presidente dijo sentirse bien y anunció que seguirá con la agenda de reuniones en la Quinta de Olivos para tratar de “acortar” sus movimientos. “Me siento bien. Una hernia de disco que se desplaza genera un dolor muy intenso. Ese dolor ha mermado a base de analgésicos, pero me exige acotar la actividad”, expresó.
En comunicación con Infobae, el mandatario informó que antes del viernes se someterá a un “bloqueo”, una técnica médica comparó con “una infiltración en el disco herniado”. “En ese mismo disco tuve el mismo problema hace 16 años y me sometí al mismo tratamiento con resultados muy buenos. No es nada grave, aunque sin tratamiento adecuado te genera dolores muy intensos”, añadió Fernández.