A partir de la implementación de la reforma laboral aprobada en la Ley Bases por el Congreso de la Nación, y posterior a la reunión del Grupo de los 6 (G6) para consensuar la reglamentación de la misma, el abogado laboralista y presidente de la Asociación Latinoamericana de Abogados Laboralistas, Matías Cremonte, criticó las políticas implementadas y sus consecuencias para los trabajadores y las trabajadoras del país. “El aumento de la jornada laboral y de la edad de jubilación van de la mano” aseguró en el aire de Radio Estación Sur.
“Hace pocos días, se supo que ya está en total funcionamiento la reforma laboral, más allá de una reglamentación pendiente. Según se supo, se habría intentado discutir con el ministro de Trabajo, la CGT y los empresarios algunos parámetros de esa reglamentación para morigerar algunos de los aspectos que se consideran más nocivos” indicó el abogado y remarcó: “Que las personas trabajen el mayor tiempo posible es el manual de la derecha”.
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La Secretaría de Trabajo, a cargo de Julio Cordero, prepara nuevos proyectos para profundizar la reforma laboral, “sobre todo aquellas cosas que estaban incluidas en el DNU, que el capital laboral fue declarado inconstitucional y no está vigente, y que no se incorporaron en la ley”. En ese sentido, Cremonte explicó que entre esas cosas están la extensión de la edad jubilatoria y el aumento de la jornada laboral con un plan económico perjudicial para los trabajadores.
“El aumento de la jornada laboral y de la edad de jubilación van de la mano. La extensión de la edad jubilatoria es para que la gente trabaje hasta morirse. Que la desocupación crezca es parte del plan económico del gobierno nacional. Instalar el temor de los trabajadores a perder el empleo es para que no reclamen”.
Sobre la propuesta de que vuelvan los ticket canasta, declaró: “Pagarle a un trabajador con un ticket canasta obliga a gastarlos en ciertos comercios“, lo que implica que con el sueldo no se puede acceder a lo que el trabajador necesita pero también que esa remuneración no entra ni en las jubilaciones ni en las prestaciones que implica un sueldo en blanco.
“El salario no es ganancia, el impuesto a las ganancias es un impuesto al trabajo. La frase ‘el salario no es ganancia’ es totalmente pertinente. Uno cobra un salario en función de una contraprestación por un trabajo que es un hecho social, y en todo caso, si el trabajo genera ganancias, se la genera el empresario, no al que cobre el salario. Entonces no debiera tributar. Esta reimplantación del impuesto a la ganancia sobre los trabajadores termina siendo un impuesto al trabajo”, indicó,
En cuanto aclos salarios, Cremonte afirmó: “La destrucción de los salarios está siendo el problema principal. El mayor problema termina siendo el nivel de los ingresos. No hay sindicato, no hay política de defensa de los intereses de los trabajadores que no choque primero con esa barrera de los niveles salariales. Con la inflación que estamos viviendo, la destrucción del salario real pasa a ser el problema principal”.