Vecinas y vecinos del barrio El Rincón, se movilizarán a las 16 horas en Belgrano y 426. La comunidad denunció que la iglesia con “la complicidad” del Delegado, José Quinteros, y el Intendente, Julio Garro, se apropiaron de un terreno que estaba destinado para construir una salita y un jardín maternal.
El reclamo comenzó hace poco más de una semana, cuando la comunidad se enteró que el terreno en el que debían construir una sala de primeros auxilios fue “cedida” a Cáritas. Desde entonces, se mantienen en estado de alerta permanente: “Los vecinos queremos la salita, no la usurpación vip de la iglesia y Julio Garro”, remarcaron en las redes sociales de la Asamblea de Vecines Barrio el Rincón.
Asimismo, manifestaron a las autoridades por no escuchar el reclamo de todo un barrio. “No necesitamos más colonizadores católicos en un barrio eternamente postergado. No queremos limosnas, queremos derechos. Ningún funcionario municipal se hizo presente para oír nuestro reclamo”, subrayaron.
La salita de salud y el jardín maternal son espacios por los que los y las vecinas de El Rincón vienen “luchando hace tiempo”. “Nuestra preocupación surge porque este espacio fue alambrado por un particular y el Delegado se lava las manos”, contaron.
Ante la avanzada de la institución religiosa, la comuna compartió la Ordenanza del Concejo Deliberante mediante la que se aprobó el Proyecto para la construcción de un Centro de Atención Primaria de Salud (CAPS), en agosto de 2020.
El terreno en disputa, está ubicado en 137 entre 442 y 443. Aseguraron que estas tierras son los últimos terrenos fiscales disponibles en el barrio, y por esto son el único espacio disponible para tal fin. “El cura Gonzalo de la Capilla Santa Teresita, ubicada en Camino General Belgrano y 426 sigue sosteniendo que quieren ocupar ese espacio, a pesar de que les informamos cuál es el destino de esas tierras”, señalaron los y las vecinas.
En este sentido, sostuvieron que “no hay ordenanza presentada para tal cesión”. Por su parte, el Intendente de La Plata ordenó una consigna policial y de la guardia urbana en las inmediaciones del terreno con la orden precisa de impedir que las y los vecinos “usurpen” estas tierras.
“Esto demuestra claramente la complicidad del municipio sobre esta cesión ilegal de tierras. Una vez más se unen la iglesia y el estado para despojar al pueblo de sus derechos”, lamentaron. Ante la problemática, convocaron “a toda la comunidad que nos acompañe en esta lucha para frenar este avasallamiento de nuestros derechos a la salud y a la educación”.