Este miércoles 3 de noviembre, el Concejo Deliberante de la ciudad de La Plata tratará el proyecto de ordenanza del “código de convivencia ciudadana” presentado por el Intendente Julio Garro. El proyecto es repudiado por trabajadores, partidos políticos y sectores que han sufrido la represión del gobierno de Juntos por el Cambio.
Ante el intento de “limitar el uso del espacio público”, se convocó una movilización a las 9 am desde Plaza San Martín hasta la Municipalidad donde realizarán un “un abrazo para expresar nuestro total rechazo al Código Represivo que intenta aprobar” el Jefe Comunal.
“Denunciamos que lejos de ser una normativa que fomente la convivencia, a lo que apunta es a crear una ciudad para pocxs, obturando la protesta social, el trabajo sexual y ambulante, y todas las expresiones de la economía popular”, remarcaron en la convocatoria.
La candidata a concejala por el Frente de Izquierda Unidad (FIT-U), Luana Simioni, sostuvo que este proyecto “atenta el derecho a trabajar”, y lo calificó como “un código represivo que le quita el pan de la boca a un montón de familias platenses que viven de lo que esas mujeres puedan recaudar tirando la manta en una calle pública”.
Y desmintió “la falsa dicotomía de que es una competencia ilegal para los comercios que pagan impuestos. Esa falsa mirada tan poco ajustada a la realidad que nos quieren plantear algunos sectores”, destacando el tinte xenófobo del proyecto garrista: “A los propios migrantes, en el caso de la comunidad senegalesa, se pretende sacarlos de la vista, no busca combatir la pobreza generando empleo genuino, sino ocultarla y entonces mirar a la ciudad desde un country, una posición muy cómoda como la tienen el Intendente y también la candidata a diputada nacional del Frente de Todos, Victoria Tolosa Paz“.
“Es una mirada distorsionada. Es una ciudad que no queremos, una ciudad que niega el derecho al trabajo a los sectores mas vulnerables, una ciudad que quiere regimentar las movilizaciones y multarlas con cifras siderales”, manifestó Simioni.
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En este sentido, el referente senegalés, Cheikh Gueye, informó: “Estamos dialogando con el municipio en una mesa de diálogo junto a nuestros abogados de La Ciega que nos están ayudando un montón, la Defensoría del Pueblo y la subsecretaria de Derechos Humanos para buscar una solución. Hay propuestas que el municipio ofrece pero no estamos conformes así que no aceptamos. Estamos buscando soluciones para dejar la calle e ir a trabajar en otro lado, pero tampoco a cualquier lado”.
Por su parte, el concejal del Frente de Todos, Ariel Archanco, señaló que “Este código se va a tener que volver a discutir de acá a cuatro años cuando haya un gobierno que entienda que un código de convivencia es eso: cómo vivimos en comunidad y cómo vamos brindándole soluciones a los sectores que hoy están en la informalidad”. En esta línea, aseguró que el tema “no es castigar a quienes están en la informalidad, sino darle soluciones y alternativas para que puedan salir de esa informalidad y desarrollar una vida digna”.
Es por ello, que organizaciones sociales, organismos de derechos humanos, colectivos de abogadxs, gremios y sindicatos, cooperativas de trabajo, colectivas feministas y LGBTIQ+, organizaciones de trabajadorxs sexuales, centros de estudiantes, organizaciones políticas, redes y espacios culturales-artísticos, partidos políticos y espacios de migrantes convocaron a una movilización este miércoles.
“En un contexto de escalada de la pobreza, el hambre y la desocupación es inadmisible que el ejecutivo municipal quiera avanzar con este proyecto, el cual consideramos que es inconstitucional y que cercena los derechos de las mayorías”, manifestaron.