El pasado viernes 17 de Septiembre, el jurado declaró “no culpables” a los tres varones acusados de abusar sexualmente a una adolescente menor de 18 años en el camping “El Durazno” de Miramar el 1 de enero de 2019. La sentencia que se dio a conocer en Mar del Plata, dejó en libertar a Lucas Pitman (24), Juan Cruz Villalba (25) y Tomás Jaime (26), quienes afrontaban cargos por “abuso sexual con acceso carnal agravado”.
La decisión fue tomada por un jurado popular integrado por 12 ciudadanes, cuestión que la defensa de la joven consideró inconstitucional por tratarse de abusos de menores. El veredicto fue dado a conocer en el Teatro Auditorium de la ciudad de Mar del Plata, por parte del presidente del jurado que intervino en el debate oral, que fue conducido por el juez del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3, Fabián Riquert.
Ante el fallo de tinte patriarcal, la titular del Ministerio de Mujeres, Diversidades y Géneros, Estela Díaz, se reunió con la familia de la denunciante, su abogado, y el subsecretario de Política Criminal, Lisandro Pellegrini. Finalizado el encuentro, comunicaron que “la familia va a presentar una declaración de nulidad por fallas en el proceso que el Ministerio va a acompañar en el camino de garantizar el acceso a la justicia y el enfoque de género”.
1. La ministra @EstelaEDiaz se reunió con la familia de la adolescente de 14 años que fue violada en el camping “El durazno” de Miramar, tras conocerse el fallo que dejó en libertad a los tres acusados. La sentencia fue deliberada en un juicio por jurados. pic.twitter.com/d2gGxBptTF
— Ministerio de Mujeres PBA (@MinMujeresPBA) September 23, 2021
A su vez, el abogado de la adolescente y su familia, Maximiliano Orsini, también cuestionó la decisión del jurado asegurando que buscará alguna vía de apelación a pesar de que en la provincia de Buenos Aires no está prevista esta instancia en este tipo de juicios. En 2020 había declarado al respecto: “La sentencia no puede ser apelada y eso viola la doble instancia consagrada en la Convención Internacional de los Derechos del Niño”.
En diálogo con Télam, Orsini calificó el veredicto como una “vergüenza” y señaló: “Primó el prejuicio social hacia la mujer, por sobre el relato de la víctima en cámara Gesell, la prueba genética existente y el reconocimiento fotográfico de los acusados”. “El jurado no le creyó a la víctima menor de edad y sí a tres hombres mayores que estuvieron con ella”, agregó señalando que tanto la sobreviviente de abuso como su familia “están devastadas”.
El fiscal del caso, Guillermo Nicora, señaló que el jurado recibió “mucha información respecto a la perspectiva de género”. Y advirtió que “lo que pasa es que la gente no le cree a las pibas, y sigue creyendo que las víctimas inventan las denuncias, y esto es un problema serio de nuestra sociedad”.
Este caso, demostró las lógicas patriarcales dentro del poder judicial, y la cultura machista que revictimiza, les quita credibilidad y cuestiona a les sobrevivientes de abusos. Es por ello que al conocerse la sentencia, el movimiento feminista se movilizó en Mar del Plata exigiendo, además de justicia y cárcel para los acusados, una reforma judicial con perspectiva de género.